Muchas personas están recurriendo a la NAC (N-acetilcisteína) por sus posibles beneficios para la salud, pero algunas están preocupadas por su impacto en los niveles de creatinina. Exploremos si la NAC puede aumentar la creatinina y qué dice la investigación sobre este tema.
¿Qué es la NAC?
NAC es un suplemento que contiene el aminoácido cisteína, que es un precursor del glutatión, un importante antioxidante del organismo. Se usa comúnmente para apoyar la salud del hígado, la salud respiratoria y como antídoto para la sobredosis de paracetamol.
Comprender los niveles de creatinina
La creatinina es un producto de desecho producido por los músculos a partir de la descomposición de un compuesto llamado creatina. Los riñones lo filtran de la sangre y lo excretan por la orina. Los niveles de creatinina en sangre pueden ser un indicador de la función renal.
El impacto de la NAC en la creatinina
La investigación sobre los efectos de la NAC en los niveles de creatinina es limitada, pero algunos estudios sugieren que la NAC puede tener un ligero impacto en los niveles de creatinina en determinadas poblaciones. Por ejemplo, un estudio publicado en el Journal of Clinical Pharmacology encontró que la suplementación con NAC en pacientes con enfermedad renal crónica resultó en un ligero aumento en los niveles de creatinina.
Sin embargo, es importante señalar que este efecto se observó en una población específica con problemas renales preexistentes. Para las personas sanas, el impacto de la NAC en los niveles de creatinina probablemente sea mínimo.
Consulte a un profesional de la salud
Si le preocupa el impacto de la NAC en sus niveles de creatinina, lo mejor es consultar con un profesional de la salud. Pueden brindarle asesoramiento personalizado según su estado de salud individual y ayudarlo a tomar una decisión informada sobre la incorporación de NAC a su régimen de suplementos.
En general, si bien existe cierta evidencia que sugiere que la NAC puede tener un ligero impacto en los niveles de creatinina en ciertas poblaciones, se necesita más investigación para comprender completamente esta relación. Como siempre, es importante abordar la suplementación con precaución y buscar orientación de un proveedor de atención médica.